Con la firme intención de salvaguardar a los niños y adolescentes del municipio contra las amenazas de captación por parte de organizaciones criminales, la Oficina de Alcalde de Malambo ha implementado un decreto que impone restricciones a la circulación de menores en espacios públicos y privados. Esta medida se establece entre las 8:00 p.m. y las 5:00 a.m. y requiere la presencia de un adulto responsable que los acompañe.
Según explicó el Alcalde Yenis Orozco, dicha iniciativa es parte de un enfoque mayor en la seguridad comunitaria que se abordó en una sesión extraordinaria del consejo municipal el día 18 de abril. Orozco destacó la creciente preocupación por el papel que desempeñan las organizaciones delictivas en poner en riesgo la vida y la integridad de los menores, ya que cada vez más jóvenes son involucrados en actos criminales. «Es alarmante ver cómo estas organizaciones delinquen y amenazan la moral y la seguridad de nuestros hijos. Por ello, debemos actuar de manera decidida para brindarles la protección que merecen mientras colaboramos estrechamente con las fuerzas de seguridad», argumentó el mandatario.
La norma, que se conoce coloquialmente como «Ley de zanahoria», nace en un contexto donde la inseguridad ha ido en aumento en Malambo. Este crecimiento de la criminalidad se ve reflejado en la expansión de bandas involucradas en la extorsión, el microtráfico de drogas y la trata de personas, que ejercen su influencia en comunidades vulnerables, provocando un ambiente de temor y desconfianza entre los habitantes de la zona.
De acuerdo con las autoridades locales, estas organizaciones criminales suelen utilizar a menores de edad para realizar tareas de vigilancia, para el transporte de armas, e incluso para involucrarse directamente en delitos más graves.
Restricciones en el municipio
El decreto estipula que los menores sorprendidos en violación de esta norma serán dirigidos por la policía de la infancia y la adolescencia a centros de protección temporales que han sido habilitados por el Ministerio de Gobierno o el ICBF. En estos centros, los menores permanecerán hasta que sean devueltos a sus padres o representantes legales, conforme a lo establecido en la Ley 1098 de 2006.
Sin embargo, se han previsto excepciones para aquellos menores que asisten a clases nocturnas. Bajo estas circunstancias, los estudiantes deberán llevar consigo una tarjeta que acredite su condición estudiantil o un registro verificable de su institución educativa. Asimismo, las actividades dirigidas a menores solo podrán realizarse entre las 6:00 a.m. y las 8:00 p.m., garantizando el cumplimiento de los requisitos legales establecidos.
Desde la administración municipal, se ha realizado un llamado a las familias y a la comunidad en general, instándolos a colaborar en la protección de los menores y en el fortalecimiento de esfuerzos conjugados para hacer frente a la influencia de grupos ilegales que buscan instrumentalizar a la juventud de la localidad.