9621 Agnes Crossing, Lake Suzanneview, New Mexico Island 84604-9295.
En un ambiente de celebración por los 248 años del municipio de Purísima, Córdoba, el evento conocido como el festival XVIII del refresco y la diabolina tomó un
En un ambiente de celebración por los 248 años del municipio de Purísima, Córdoba, el evento conocido como el festival XVIII del refresco y la diabolina tomó un giro inesperado y polémico cuando la reconocida cantante de música Vallenata, Ana del Castillo, interrumpió su actuación para hacer una grave acusación. Durante su presentación, Ana del Castillo denunció que le habían robado su teléfono celular.
Con visible agitación, el artista detuvo su show y solicitó públicamente la devolución de su dispositivo móvil, asegurando que no tomaría medidas severas contra aquellos que decidieran devolverlo. Su angustia se hizo evidente cuando exclamó: “¡No puedo creer que la gente de Purísima sea delincuente! ¡Por favor, necesito que me devuelvan mi teléfono, nojoda!”, lo que generó reacciones mixtas en el público, llenas de aplausos y críticas que rápidamente se viralizaron en las redes sociales.
La cantante continuó su mensaje diciendo: “Lo que le exhorto a la policía y a las personas de seguridad es que si alguien decide traerme de vuelta mi teléfono, no les haré ningún daño, los perdonaré. No puedo hacer nada contra las personas que robaron mi teléfono, no tengo la intención de tomar represalias. Sin embargo, realmente necesito mi teléfono, nojoda”, añadió, dejando claro su malestar ante la situación.
No obstante, la comunidad de Purísima, así como los organizadores del evento, rechazaron de manera contundente las acusaciones. Víctor Rafael López Gonzales, un representante local, aclaró que existen pruebas en video que demuestran que el teléfono celular no fue realmente robado; al contrario, se había caído en un área donde únicamente se encontraba el equipo musical de Ana del Castillo.
López Gonzales calificó las afirmaciones hechas por la cantante como injustas, señalando que afectan severamente la reputación de un pueblo conocido por su hospitalidad, su rica cultura y su respeto hacia los visitantes. Además, hizo un llamado al artista para que rectifique públicamente y se honre la verdad respecto a lo que realmente ocurrió.
Este incidente ha generado un amplio y acalorado debate en las redes sociales, con usuarios divididos entre quienes critican la actitud de Ana del Castillo y aquellos que muestran empatía por su incomodidad ante la pérdida de un objeto tan personal y de valor. La situación ha hecho que muchos se cuestionen sobre la responsabilidad de los artistas en la forma en que abordan sus problemas personales en público.
Hasta la fecha, ni el cantante ni las autoridades locales han confirmado si el teléfono ha sido recuperado, y los organizadores del evento aún no han emitido declaraciones oficiales al respecto. Este episodio resalta la fragilidad de las celebraciones festivas, donde un momento de alegría puede tornarse en controversia pública.
Vea más noticias aquí.
Foto:
