La opositora venezolana María Corina Machado fue galardonada este viernes con el Premio Nobel de la Paz, en reconocimiento a su lucha por la democracia y los derechos humanos en Venezuela. Desde la clandestinidad, la dirigente celebró el anuncio como un apoyo internacional a la causa de la libertad en su país.

«Este premio es de todos los venezolanos que nunca se han rendido. Es una señal clara de que el mundo está con nosotros en esta batalla”, expresó Machado a través de su cuenta en la red social X. “Estamos más cerca que nunca de conquistar la libertad, y contamos con el firme apoyo del presidente Donald Trump”, agregó.

El Comité del Nobel, con sede en Oslo, destacó a Machado por «su compromiso con una transición justa y pacífica de un régimen autoritario a una democracia plena», subrayando su papel como figura clave del movimiento opositor venezolano. “Ella es una voz que resiste en medio de la represión, una valiente defensora de la paz”, declaró durante la ceremonia Jørgen Watne Frydnes, presidente del comité.

La líder opositora no ha sido vista en público desde el 9 de enero de este año, cuando encabezó una multitudinaria manifestación en Caracas en apoyo a la victoria electoral de Edmundo González Urrutia, cuyo triunfo no fue reconocido oficialmente. Al día siguiente, Nicolás Maduro prestó juramento para un nuevo mandato, tras unas elecciones ampliamente cuestionadas por la comunidad internacional.

Machado, quien recientemente expresó su apoyo al despliegue de buques de guerra estadounidenses en el Caribe como medida de presión contra el régimen de Maduro, reafirma con este galardón su figura como símbolo de la resistencia democrática en Venezuela.

El Premio Nobel de la Paz de 2025 se convierte así no sólo en un hito personal para Machado, sino también en un gesto de solidaridad internacional hacia un país que, según ella, «está a punto de recuperar su libertad».

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