El miércoles 7 de mayo, la localidad de Suárez, en el departamento de Norte del Cauca, fue escenario de un ataque violento que dejó a muchos en shock. Este ataque, llevado a cabo por los disidentes del grupo armado conocido como el frente Jaime Martínez, involucró disparos de rifle y el uso de artefactos explosivos, lo que intensificó el clima de temor en la región.