La Oficina del Alcalde de Cartagena toma el control de la ESA después de cuatro años de intervención del gobierno nacional
mayo 14, 2025
0
El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, junto con la Superintendencia de la Salud, ha realizado un anuncio significativo que marca el final de la intervención en la ciudad.
El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, junto con la Superintendencia de la Salud, ha realizado un anuncio significativo que marca el final de la intervención en la ciudad. Esta intervención estuvo marcada por una serie de deficiencias administrativas y financieras que se remontan a 2021, dejando una huella complicada en la atención médica. Ahora, el distrito y la nación han prometido trabajar juntos para mejorar los servicios de salud en los diversos vecindarios de Cartagena.
De este modo, la Compañía Social del Estado (ESA) Cartagena de Indias ha regresado oficialmente a la administración del alcalde, después de haber estado bajo la intervención de la Superintendencia Nacional de la Salud durante casi cuatro años.
Este importante anuncio fue realizado el lunes por el alcalde Dumek Turbay y la directora de medidas especiales del Supersalud, Mónica Etelmira González, en una conferencia de prensa llevada a cabo en el Hotel Hyatt Regency, ubicado en Bocagrande.
La intervención se había impuesto el 18 de mayo de 2021 debido a problemas financieros graves. Foto:Redes sociales
La formalización de esta medida se llevó a cabo mediante la resolución 2025420000003784-6, emitida el 13 de mayo de 2025, a través de la cual se elevó la intervención forzada administrativa y se ordenó al controlador saliente, Julio César Piños, a entregar nuevamente los activos y responsabilidades de la ESA a la administración del distrito.
La intervención se había implementado el 18 de mayo de 2021, motivada por múltiples deficiencias operativas, financieras y administrativas que se identificaron durante la gestión del alcalde William Dau Chamat. A lo largo de este tiempo, la medida fue extendida en tres ocasiones, siendo la última en mayo de 2024. Aunque en julio del año anterior una decisión del Tribunal Administrativo de Bolívar suspendió temporalmente la intervención, en diciembre el Consejo de Estado devolvió el control al gobierno nacional, lo que generó una intensa lucha legal que finalmente se resolvió este mes mediante un acuerdo alcanzado entre ambas partes.
Vemos la salud como un derecho, no como un privilegio. En sectores como San José de Los Campanos, Arroyo Grande o Arroyo de Piedra, donde no llegó nada, ahora se garantiza atención digna y oportuna.
Un nuevo comienzo con el trabajo conjunto
La directora Mónica González subrayó que la decisión de levantar la intervención se basa en que se han superado la mayoría de los indicadores que justificaron su implementación. «Si bien sabemos que la entidad aún no es perfecta, se trata de un caso de éxito institucional. La oficina del alcalde ha demostrado un firme compromiso con la mejora, lo que nos permite ahora entrar en una nueva fase, no de intervención, sino de acompañamiento y articulación», aseguró.
El alcalde Dumek Turbay, por su parte, reafirmó su confianza en este proceso y compartió la responsabilidad con el gobierno nacional. «Recibimos nuevamente la administración del sistema de salud de Cartagena con la firme convicción de que podemos mejorar la atención médica, especialmente para nuestros ciudadanos más vulnerables. Este es un compromiso que asumimos con nuestro pueblo y con el presidente Gustavo Petro», comentó.
Turbay añadió que su oficina se enfocará en fortalecer la atención primaria, formalizar el personal médico y asegurar la estabilidad financiera de la entidad. «Queremos abordar quejas relacionadas con médicos trabajando sin contratos, personal no remunerado y comunidades sin acceso a servicios de salud. Siempre estamos comprometidos a colaborar con el Supersalud para evitar futuros problemas», señaló.
Compromisos con barrios populares
Cartagena de Indias, con «la falda de la popa» como telón de fondo. Foto:John Montaño / The Time
El regreso de la ESE al distrito estará acompañado de un ambicioso plan de inversión en infraestructura hospitalaria y provisión de equipos médicos. Según lo indicado por el alcalde, ya se han establecido nuevos centros de salud, como El Pozón, y los hospitales de Nelson Mandela y Canapote se han inaugurado recientemente. Además, se ha anunciado la construcción de dos nuevos centros de salud en la zona norte y un plan para adquirir ambulancias que mejoren la respuesta ante emergencias.
«Vemos la salud como un derecho, no como un privilegio. En barrios como San José de los Campanos, Arroyo Grande o Arroyo de Piedra, donde anteriormente no llegó atención adecuada, ahora se asegurará un servicio digna y oportuno», enfatizó Turbay.
Supervisión y continuidad
Cartagena de Indias Foto:John Montaño / The Time
La Superintendencia de la Salud no se desvinculará del proceso en su totalidad. Ambas entidades han acordado establecer un cronograma técnico periódico de monitoreo y evaluación para garantizar que los procesos de mejora sigan adelante y que se mantenga la calidad en la atención médica.
«La colaboración entre la nación y el territorio no termina aquí. Continuaremos brindando apoyo técnico y estratégico a la oficina del alcalde para asegurar que este modelo de recuperación institucional se sostenga y pueda servir como un ejemplo para otros municipios», afirmó González.
Un desafío por delante
A pesar del optimismo que acompaña a este anuncio, los retos que enfrenta Cartagena son significativos. Persisten los reclamos de ciudadanos respecto a los tiempos de espera, la calidad del servicio y la falta de personal en ciertas áreas. La gestión local debe demostrar que es capaz de mantener y mejorar los avances logrados durante la intervención.
Con esta decisión, Cartagena abre un nuevo capítulo en la administración de su red de salud pública. Ahora, el verdadero desafío será consolidar una atención médica eficiente, cercana y humanizada, bajo una administración local que ha prometido no repetir los errores del pasado. La salud, en definitiva, vuelve a estar en manos de Cartagena.