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Ayer al mediodía, -‘Juan Carlos’, como llamaremos a este trabajador del Hospital Universitario de Sincelejo para proteger su identidad- fue a recoger el almuerzo que le dieron y
Ayer al mediodía, -‘Juan Carlos’, como llamaremos a este trabajador del Hospital Universitario de Sincelejo para proteger su identidad- fue a recoger el almuerzo que le dieron y de inmediato lo envió a su casa para que comieran cinco personas, para que él no probara ni un bocado de comida.
Ese almuerzo estuvo dirigido a su esposa y sus cuatro hijos, quienes junto a él atraviesan las mayores necesidades de sus vidas, porque el El Hospital Universitario de Sincelejo -HUS- les debe 40 meses de salario del 2015 al 2019 y actualmente 10 meses más.
“Este año no hemos visto ni un peso de los meses que hemos trabajado”, dice en medio de la mayor tristeza.
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Son trabajadores vinculados al Hospital Universitario de Sincelejo a través del cooperativas, Sintrapesalud y Recursos Activos, Sintek y Sintragesaentidades que deben recibir recursos de la entidad de salud para pagar los salarios de sus empleados.
Son trabajadores de las áreas de mantenimiento, limpieza, seguridad y planta que también forman parte del hospitales de San Marcos, Corozal y San Juan de Betuliatodo fusionado en un solo gestor.
protestas de los trabajadores Foto:archivo privado
‘Juan Carlos’ tiene que confiar la comida en tiendas donde la deuda es cuantiosa y le siguen dando lo que pide más por amistad que otra cosa. No tiene casa propia y ya debe más de seis meses de alquiler.
«La situación es muy difícil. Obtenemos lo poco que ganamos porque trabajamos de forma independiente, hurgamos de alguna manera para intentar sobrevivir», afirma.
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Sólo en el Hospital Universitario de Sincelejo hay una treintena de trabajadores que están pasando por la misma situación, pues muchos optaron por dejar de trabajar y otros al parecer fueron despedidos de sus puestos de trabajo.
«Aquí, quien denuncia algo es despedido inmediatamente del trabajo. Lo hemos aguantado porque después no tenemos dónde cobrar, por eso nos quedamos aquí, incluso en medio de las dificultades», dijo la fuente.
Para este humilde trabajador la factura de la deuda supera los millones de pesos, aunque para otros esa cifra es ínfima por la cantidad de trabajadores que son y todo lo que se debe pagar por ellos.
Estos trabajadores no pueden explicar cómo ha crecido tanto la deuda, si aparentemente Cada mes el Gobierno de Sucre transfiere recursos al HUS y estos a su vez Deberían pagar a las cooperativaspara que los empleados reciban sus salarios.
Sin embargo, dice que las cosas no suceden así y supuestamente las cooperativas no reciben el dinero, lo que permite que las facturas se disparen mes tras mes.
La realidad de las cosas parece nadar en un mar de corrupción, donde presumiblemente los únicos que ganan millones de pesos son los abogados que interponen demandas y supuestamente arreglan pagos con los gerentes de turno.
«Si les van a pagar directamente, supuestamente tendrían que entregar entre el 20 y el 35 por ciento de la deuda a la gerencia de turno. El otro supuesto arreglo es que lo hacen con los abogados y todos estarán ganando mucho dinero», dijo.
Los trabajadores a quienes se les deben tantos meses de salario también dijeron que, durante la administración del gobernador Edgar Martínez Romero, se llegó a un acuerdo para pagar los salarios atrasados a los trabajadores, quienes firmaron todos los documentos y al parecer el dinero se utilizó para otras cosas.
«Nos iban a pagar el 15 de mayo y el otro 50 por ciento para el mes de julio, pero vino una intervención de Bogotá, los interventores empezaron a manejar el dinero y no pagaron. Empezaron a pagar otras deudas viejas que tenían demandas y a hacer arreglos internos», dijeron.
“Estas deudas que tenían demandas, los abogados aparentemente le dieron el 30 por ciento al gerente interviniente, incluso el señor que estaba a cargo de la cooperativa sufrió un infarto y murió esperando el pago, porque supuestamente le querían quitar ese porcentaje y él sostuvo que no daría ni un solo peso”, afirmaron.
Actualmente también existen deudas con trabajadores de los hospitales de San Marcos y Corozal.
En San Marcos acaba de finalizar una huelga de trabajadores y se ha anunciado un nuevo cese de actividades.
Para el alcalde de este municipio, Arnulfo Ortega, el gran problema es la fusión por adsorción que se realizó, lo que ha llevado a la crisis en los hospitales.
“Propusimos una alianza público-privada, o que la administración departamental obtenga dinero por regalías para mejorar la infraestructura, los servicios, la facturación y ser autosuficientes”, dijo.
De seguir así, afirmó que este hospital puede terminar colapsando.
Intentamos conocer la opinión del gerente del Hospital Universitario de Sincelejo, Ezequiel Díaz, pero nos dijo que estaba en una reunión, que nos volvería a llamar, pero nunca lo hizo.
Francisco Javier Barrios
Especial para EL TIEMPO
[email protected] En X: @barrios_ye2216
