La Garza Agamí, endémica de los manglares de Córdoba y Sucre, será el símbolo de los Juegos Nacionales 2027
– Tinta clara
octubre 29, 2025
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La Garza Agami (Agamia agami), esencia natural de los manglares de Córdoba y Sucre, se convierte en Naki, el mascota oficial de los Juegos Nacionales, Paranacionales 2027 y
La Garza Agami (Agamia agami), esencia natural de los manglares de Córdoba y Sucre, se convierte en Naki, el mascota oficial de los Juegos Nacionales, Paranacionales 2027 y II Juegos Juveniles.
Esta ave emblemática es la símbolo de la unión, fortaleza y resiliencia de los habitantes de Córdoba y Sucrerepresentando también la biodiversidad caribeña y el lenguaje universal del afecto.
“Las otras especies además del Agami son gregarias, siempre se encuentran en grupos, especialmente las que siguen al ganado, y está la garza que todos conocemos, que es delgada, alta y blanca, que se ubica en las orillas de los cuerpos de agua en general, donde pescan, y no se adentran en aguas profundas.
Alberto Muñoz Rojas, profesional especializado de la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS).
La misteriosa garza Agami
Agami la garza Foto:Cortesía de Víctor Puello
La garza Agami es un ave de silueta esbelta y naturaleza misteriosa.conocido por esconderse en los intrincados manglares de la región. A diferencia de otras especies de su orden, el Agami luce un plumaje hermoso y vibrante con colores brillantes: verde metálico, azul, cobre y varios tonos de gris claro y oscuro.
Esta especie pertenece al orden Pelecaniformes y a la familia Ardeidae. Su policromía y comportamiento la distinguen notablemente, ya que la mayoría de garzas son de un solo color (blanco), y suelen ser gregarias.
“Las especies distintas al Agami son gregarias, siempre se encuentran en grupos, sobre todo las que siguen al ganado, y está la garza que todos conocemos, que es delgada, alta y blanca, que se ubica en las orillas de los cuerpos de agua en general, donde pescan, y no se adentran en aguas profundas”, explica Alberto Muñoz Rojas, profesional especializado de la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS).
Muñoz Rojas también especifica que la garza Agamí tiene una distribución corporal más proporcionada y presenta un marcado dimorfismo sexual en el macho: «El macho es más radiante, más hermoso; es una garza vistosa, de plumaje brillante, mientras que las hembras son más opacas, como ocurre con la mayoría de las aves, como ocurre con el canario y el búho».
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Un ecosistema en equilibrio y riesgo
Agami la garza Foto:cortesía de Víctor Puello
El manglar, con su combinación de agua y peces, se convierte en el equilibrio perfecto para la subsistencia de los Agami. Sin embargo, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), esta especie se encuentra en estado vulnerable.
“Esto significa que están empezando a desaparecer de los ecosistemas, que están al borde de la extinción. Sin embargo, estas aves son las responsables de mantener el equilibrio de ese ecosistema para que el medio ambiente se sostenga y, además, para que se pueda mantener la especie”, comenta el profesional de CVS.
El Agamí es originario de Centro y Sudamérica, con una distribución que llega hasta Perú, donde encuentra un clima tropical favorable. No se encuentra en regiones más al sur (como Argentina o Chile) ni más al norte (como México o Canadá), debido a las diferencias de temperatura.
Es un ave que trabaja sola o en parejas, ubicada en las orillas de cuerpos de agua, donde son fundamentales para el control de pequeñas poblaciones de peces. “Se convierten en cazadores oportunistas, no persiguen peces pequeños como el halcón. Se quedan quietos, aprovechan la proximidad de su alimento y lo capturan”, afirma Muñoz.
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Hábitat compartido en Córdoba y Sucre
Los ecosistemas de manglar se mantienen saludables gracias a la garza Agamí, que permanece casi al cien por cien dentro de este ambiente y lo hace en parejas, macho y hembra.
En Córdoba se ubican fundamentalmente en los manglares de San Antero y San Bernardo del Viento, donde se identifican esteros: lugares donde se combinan aguas semidulces y semisalobres en la desembocadura de los ríos al mar. Específicamente, el sector Boca de Tinajones en San Bernardo del Viento y el Manglar de Cispatá o Cispataca son propicios para su permanencia.
En Sucre, la garza Agamí habita en la Boca de la Ciénaga, un inmenso espejo de agua rodeado de manglares. También Se ubica en la zona del Golfo de Morrosquillo, incluyendo Tolú, el balneario de Rincón del Mar, Berrugas y Balsillas, zona rural de San Onofre.
Lamentablemente los humedales y manglares de ambos departamentos se encuentran en peligro por la intervención humana, como la construcción de cabañas turísticas, lo que aumenta el grado de vulnerabilidad del ecosistema y de todas las especies que lo habitan.
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El nacimiento de Naki.
Las administraciones departamentales de Córdoba y Sucre, sedes de los eventos deportivos, lanzaron un concurso para elegir la mascota que simbolizaría la unión de las dos regiones. Entre 72 propuestas de 20 ciudades, la garza Agamí fue elegida por representar la biodiversidad del Caribe, la sostenibilidad ambiental y la hermandad regional.
“Precisamente creo que, por el riesgo que existe de que la especie desaparezca y la forma en que actúa en el ecosistema para mantener el equilibrio, el jurado decidió hacer de Agamí la imagen de los Juegos”, afirmó el profesional de CVS.
El diseño, creación y concepto de Naki es obra de Alfredo Rafael Cejín Oquendo, oriundo de Montería. El nombre Naki surgió para crear empatía con el público: “El nombre surge como una creación sonora tierna y fácil de pronunciar, una especie de diminutivo derivado de Agamí, que transforma la seriedad del nombre científico en una versión cercana, amable y con personalidad propia”, explicó su creador.
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Naki es una invitación a reconocer el riqueza cultural y natural de Córdoba y Sucre
Patricia Duque, Ministra de Deportes, señaló que “Naki simboliza la fuerza tranquila de los humedales y la esperanza de un ecosistema saludable, reflejando el espíritu deportivo y natural del Caribe colombiano. La garza Agamí encarna el propósito de los Juegos de unir el deporte con la conservación ambiental y el orgullo regional”.
Erasmo Zuleta Bechara, gobernador de Córdoba, afirmó que la elección de la garza Agamí “nos identifica como región y nos proyecta al país como anfitriones que valoran su entorno natural. La garza Agamí es una especie que habita en nuestros humedales y, al igual que los deportistas, se mantiene firme y elegante ante los desafíos”.
Por su parte, la gobernadora de Sucre, Lucy García Montes, destacó que la imagen y la mascota representan la hermandad entre ambos departamentos: “Córdoba y Sucre comparten manglares, pantanos y mares. Naki nos invita a proteger este patrimonio natural mientras abrimos las puertas del Caribe colombiano a todo el país”.
De aquí en adelante, Naki es una invitación a reconocer la riqueza cultural y natural de Córdoba y Sucreconvirtiendo el enigma de la garza Agamí en un entrañable símbolo de cercanía y simpatía.