El ex presidente Donald Trump otorgó un mandato de «tres o cuatro días» a Hamas para responder a un plan de paz de 20 puntos negociados junto con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu. El plan exige la desmilitarización de Hamas, su exclusión del futuro gobierno de Gaza y la entrega de rehenes, a cambio de retiro militar gradual e intercambio de prisioneros.

A pesar del apoyo de varios países de la UE, India, Rusia y Naciones Árabes, el proyecto ha sido criticado por su aparente favoritos de los intereses israelíes y su escasa protección al derecho humanitario internacional palestino. En Gaza, la crisis humanitaria se agrava: los informes indican decenas de miles de muertos y cientos de muertos por hambre, mientras que la infraestructura básica se derrumba después de años de bloqueo y conflicto.

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