Las redes sociales han evolucionado para convertirse en un poderoso reflejo de la sociedad contemporánea, mostrando obsesiones y estándares de belleza que impactan profundamente en la autoimagen de muchas personas. Hace menos de diez años, se celebraba el surgimiento de movimientos como el del «cuerpo positivo», que abogaban por la inclusión y aceptación de todos los tipos de cuerpos. Sin embargo, la realidad actual parece remontarnos a principios de siglo, donde lo que creíamos superado parece haber resurgido, aunque en una nueva forma que ha despertado la preocupación de expertos, gobiernos y plataformas digitales. Este fenómeno se conoce como Skinnytok.

La tendencia viral. El hashtag #Skinnytok acumula más de 57,000 videos en Tiktok, donde se observa a jóvenes que principalmente comparten consejos sobre cómo perder peso de manera rápida, frecuentemente a través de dietas extremadamente restrictivas y ejercicios excesivos. En la mayoría de estos videos, las mujeres son visiblemente delgadas y promueven estos comportamientos como si fueran prácticas saludables. Esta clase de contenido ha sido vinculada con un inquietante aumento en los trastornos alimentarios entre la juventud, generando alarmas sobre los efectos nocivos que estas tendencias implican, como lo indica un informe de Libération.

Un problema de fondo más. Al buscar el hashtag, lo que inicialmente aparece es un mensaje que dice: «Tu peso no te define», seguido de videos que incluyen frases como: «¿Si quieres ser flaco? Tienes que hacer actividades flacas» y «Trauma gordo», donde se muestran fotografías de cómo estaban antes.

Esta situación es solo una evidencia más de la normalización de los trastornos alimentarios. Charlyne Buigues, enfermera con especialización en trastornos alimentarios, explicó a The Guardian que estos clips no solo fomentan las dietas restrictivas, sino que también cultivan una cultura que glorifica el sufrimiento físico como una señal de éxito. Además, el Dr. Chica, especialista en medicina interna, detalló para Forbes que los consejos de Skinnytok pueden enseñar a los jóvenes a interpretar la sensación de hambre como un signo de logro, cuando en realidad es una respuesta biológica natural del cuerpo. El aumento de trastornos alimentarios como la anorexia entre adolescentes es alarmante, y este tipo de contenido solo exacerba un problema ya existente.

El público objetivo. Una grave preocupación es que la audiencia principal de TikTok está compuesta en gran medida por adolescentes. De acuerdo con datos de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, 1 de cada 20 jóvenes en España puede estar lidiando con problemas de conducta alimentaria. Adicionalmente, un estudio ha demostrado que ver este tipo de videos puede dañar la autopercepción; tan solo ocho minutos de inspiración delgada es suficiente para incrementar la insatisfacción corporal entre mujeres jóvenes. Esto se agrava por el hecho de que expertos en salud mental, como Stephen Buchwald, han explicado que el bombardeo constante con estándares de belleza inalcanzables puede generar un círculo vicioso de autocrítica y baja autoestima, que afecta gravemente la salud mental, especialmente entre adolescentes.

La responsabilidad de las plataformas. Ante el crecimiento de #Skinnytok, los gobiernos e instituciones de Europa han comenzado a implementar medidas más severas. Según Politico, el regulador Arcomen de Francia y las autoridades europeas están investigando este fenómeno para determinar si TikTok está cumpliendo con las regulaciones vigentes para la protección de menores, específicamente en lo que respecta a la Ley de servicios digitales de la UE, que exige a las plataformas mitigar los riesgos asociados con contenido dañino. Aunque TikTok ha añadido una advertencia al buscar el hashtag, algunos expertos afirman que estas medidas no son suficientes, ya que los algoritmos de la plataforma siguen priorizando el contenido viral, sin considerar las graves consecuencias de propagar mensajes que pueden ser perjudiciales para la imagen corporal.

El avivamiento de la década de 2000. Este fenómeno no se limita solo a las redes sociales. La resurrección de los cánones de belleza de la década de 2000 ha hecho su aparición nuevamente en las pasarelas, evocando el estilo más puro de Kate Moss: ultradelgada. Desde el regreso del desfile de Victoria’s Secret el año anterior, hasta las transformaciones de celebridades como Adriana Lima, que han sido impactantes, y el uso de Ozempic por parte de figuras como Christina Aguilera, que es ampliamente conocido, han reavivado unos códigos estéticos que dominaban hace dos décadas, donde la extrema delgadez se asocia erróneamente con éxito y glamour.

El culto peligroso de extrema delgadez. Uno de los elementos más preocupantes en torno a la tendencia de Skinnytok es la perpetuación de la girofobia en la sociedad. Desde las plataformas sociales hasta la industria de la moda y la publicidad, se continúa promoviendo la delgadez como el único ideal de belleza aceptable. Esta visión distorsionada de la estética lleva a muchas personas a sentirse avergonzadas de sus cuerpos al no cumplir con un estándar que en realidad es irreal. Antes de que esta tendencia surgiera, existía un filtro conocido como «Filtro gordito» que fue eliminado de la plataforma después de múltiples quejas de usuarios que denunciaron la humillación que producía. Con #skinnytok, el efecto es totalmente opuesto, ya que la extrema delgadez se presenta como un objetivo de mejora personal, lo que muestra el largo camino que debemos recorrer para cambiar esta narrativa dañina.

Imagen | Tiktok

| La gente está harta de los mil pasos del cuidado de la piel, por lo que la última tendencia de belleza es solo una cosa: los exosomas