El experto revela el perfil criminal del pastor acusado de abuso sexual
- mayo 9, 2025
- 0
El caso de José Erley Ramírez Garcés, El pastor protestante de Santa Rosa de Cabal, capturado y linchado por la comunidad tras el escape de su hijastra de
El caso de José Erley Ramírez Garcés, El pastor protestante de Santa Rosa de Cabal, capturado y linchado por la comunidad tras el escape de su hijastra de
El caso de José Erley Ramírez Garcés, El pastor protestante de Santa Rosa de Cabal, capturado y linchado por la comunidad tras el escape de su hijastra de 13 años, quien denunció los abusos a los que fue sometida, ha generado una profunda conmoción en la comunidad local, y más allá. La naturaleza de los hechos y la forma en que ocurrieron han dejado a muchos paralizados de incredulidad y rabia.
La actuación de Ramírez fue, aparentemente, fría y premeditada, lo que ha suscitado una ola de reacciones en la ciudadanía. La elección de música cristiana a alto volumen para ocultar los gritos de su víctima, así como su intento de cavar un agujero en el patio de su granja con la intención de enterrar a la niña, son detalles que evidencian un comportamiento criminal totalmente aberrante.
El tiempo consultó a un experto en criminología para conocer su opinión sobre las características de personalidad y el comportamiento de este individuo, quien ahora enfrenta cargos graves por crímenes de acceso y secuestro sexual violento.
La policía de Caldas capturó al pastor cuando salió del centro médico donde recibía atención. Foto:Policía de Caldas
Belisario Valbuena, criminólogo, psicólogo forense y perfilador criminal, quien habló exclusivamente con este periódico, destacó las implicaciones de los actos de Ramírez Garcés y sugirió que, de no haber sido capturado, podría haber continuado perpetrando crímenes similares.
“Podemos señalar que encaja en lo que se conoce como el perfil del carismático agresor sexual, con rasgos narcisistas y un modo depredador meticulosamente planificado. El uso de símbolos religiosos y su posición de autoridad moral, junto con la evidente intención de homicidio, lo colocan como una amenaza de alto riesgo”, comentó Valbuena.
Para este experto, Ramírez Garcés exhibió una fachada engañosa: era un líder espiritual en público, pero un depredador oculto en privado. “No se trata solo de hipocresía moral; es una adaptación psicológica con mecanismos pervertidos. Su papel público le permitió ocultar comportamientos privados aberrantes y manipuló a su entorno emocional y espiritual. Esto explica por qué algunos de sus seguidores, en un acto de irresponsabilidad, llegaron a sugerir que él era víctima de una supuesta posesión demoníaca. Todo eso forma parte de la manipulación que logró ejercer sobre sus feligreses”, añadió Valbuena.
José Erley Ramírez durante una actividad religiosa en la Iglesia Protestante a la que pertenecía. Foto:Archivo privado
Según el análisis de Valbuena, con información de algunos vecinos, Ramírez Garcés incluso llegó a considerar a su víctima como una hija legal, lo que indica que se creía invulnerable e intocable, confiado en que nadie podría descubrir su verdadera naturaleza. Sin embargo, no previó que una niña, de apenas 13 años, con valor y determinación, cambiaría la historia mediante la denuncia.
“Como un carismático con un enfoque moralizante, él cree estar por encima de la ley y del juicio social; gracias a su reputación, generó un ambiente de miedo y aislamiento. Seguro pensaba que podría continuar con su vida normal tras los abusos, ya que en su mente, si su víctima decidía quitarse la vida, su crimen quedaría oculto y sin castigo”, comentó Valbuena, quien ha investigado comportamientos criminales durante décadas.
El criminólogo y psicólogo forense consultado por El Tiempo opinó que es claro que Ramírez no actuó de manera impulsiva. «Todo apunta a que había una motivación detrás: el control, la dominación sexual y el poder simbólico. Pruebas de esto incluyen su intento de cavar un pozo, movilizar a la víctima y la elección de música religiosa para silenciar sus gritos. Estos comportamientos indican una acción fría y premeditada«, explicó el experto.
El pastor fue linchado tras ser descubierto persiguiendo a su víctima en Santa Rosa de Cabal. Foto:Archivo privado
Según Valbuena, en este caso puede conjugarse un deseo sexual desviado, típico de pedófilos, con la necesidad de eliminar a la víctima para evitar ser descubierto. Incluso podría haberse sentido invulnerable por el poder que ejercía en su comunidad.
El comportamiento del pastor Ramírez, según Valbuena, no solo se asemeja a arquetipos de abusadores en Colombia, sino también a nivel mundial.
«Su conducta, analizada críticamente, evoca casos como el de Luis Alfredo Garavito, quien también utilizó símbolos religiosos y discursos moralistas para atraer a sus víctimas, presentándose como un hombre de Dios», apuntó.
Asimismo, Valbuena establece similitudes con líderes carismáticos que llevan una doble vida, incluyendo algunos sacerdotes católicos en Antioquia, o con Larry Nassar, un médico de gimnasia olímpica en Estados Unidos, que abusó de más de 250 niñas y adolescentes durante décadas. “Este individuo era conocido por su personalidad carismática y su buena reputación. Las familias incluso lo llegaron a describir como un ángel guardian”, concluyó el especialista.
Además, menciona que se pueden establecer paralelismos con un sacerdote mexicano, conocido por haber abusado de al menos 60 menores. Este hombre, ya fallecido, fue el padre de varios niños concebidos a través de actos violentos, siendo conocido como Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo.
Linchado en Santa Rosa de Cabal tras ser descubierto. Foto:Archivo privado
“Muchos de sus víctimas hablaron años después, algunas incluso tras la muerte de Maciel, quien había sido considerado un hombre santo y reformador antes del inicio de las investigaciones en su contra”, declaró Valbuena.
Sin lugar a dudas, la realidad nos indica que el pastor José Erley Ramírez Garcés podría estar enfrentando al menos 40 años de prisión, una condena que la defensa de la víctima está solicitando, y que también respalda la oficina del fiscal. Esto proporciona un alivio para las comunidades de Santa Rosa y Chinchiná, que han clamado por justicia y castigo para este individuo.
Sin embargo, su captura y eventual condena no solo lo separarían de las calles, sino que también los liberarían de un «alto riesgo para la sociedad», como lo ha calificado este experto en criminalidad.
«Estos agresores carismáticos son peligrosos por no despertar sospechas, ya que poseen una imagen admirable. Sus víctimas, al revelar los abusos, a menudo son desacreditadas y la comunidad contribuye a revictimizarlas. Estas personas suelen tener acceso continuo y descontrolado a menores o personas vulnerables. Manipulan no solo a la víctima, sino también al sistema social e institucional que los rodea, usando su imagen y su relación con la religión como herramientas. Su verdadero ingrediente es la manipulación emocional y simbólica.» Así lo describe Valbuena.
Dada la complejidad de la personalidad de este pastor, el experto no descarta que haya abusado ante otros menores y que, de no estar en prisión, podría reincidir. «Representa un riesgo muy significativo”, concluyó.
*Es importante destacar que estos hechos solo podrían ser confesados por el involucrado o ser demostrados con evidencia en un juicio.
Leon XIV es el nuevo Papa elegido en el Vaticano | Tiempo Foto: