Condenación máxima de 60 años de prisión a tres responsables del ataque incendiario contra el registrador de Gamarra
mayo 8, 2025
0
Una condena ejemplar en un contexto marcado por uno de los episodios más críticos de violencia electoral en el país durante el año 2023. El 28 de octubre,
Una condena ejemplar en un contexto marcado por uno de los episodios más críticos de violencia electoral en el país durante el año 2023. El 28 de octubre, la justicia penal especializada de Valledupar, en el departamento de César, dictó una condena de 20 años de prisión a Yuberlys Bermúdez Rubiano, en el marco del proceso de elecciones regionales.
De acuerdo con lo que se estableció durante el juicio de primera instancia, los tres condenados fueron hallados responsables de delitos graves como homicidio agravado, intento de homicidio agravado y uso de fuego. Además de cumplir con la privación de libertad, se les ordenó el pago de una multa equivalente a 210 salarios mínimos legales mensuales vigentes, y el juez estipuló que la condena debía ser cumplida en una prisión de máxima seguridad.
Julio Rojas Marín, ex candidato para el Consejo Municipal de Gamarra (Cesar). Foto:Redes sociales
El Fiscal General de la Nación presentó durante el juicio un amplio conjunto de pruebas documentales, testimoniales y audiovisuales que resultaron fundamentales para reconstruir los hechos y comprobar la responsabilidad directa del acusado en el ataque. El juez especializado organizó de manera meticulosa la teoría del caso presentada por la entidad acusadora y otorgó especial importancia a los videos capturados por cámaras de seguridad y a las declaraciones realizadas por testigos, incluidos funcionarios del registro y residentes del área afectada.
Un ataque con gasolina y fuego en medio de una protesta
Los ecos de esta tragedia se hicieron sentir durante una manifestación violenta que se originó en respuesta a una decisión del Consejo Electoral Nacional, la cual supuestamente perjudicaba los intereses de un candidato local. La concentración, que comenzó frente al registro municipal de Gamarra, se tornó rápidamente en disturbios y actos de vandalismo, culminando en un incendio que destruyó significativamente la sede institucional.
Según el material de prueba presentado, Isaiah Peña Oliveros y su esposa, Yuberlys Bermúdez Rubiano, llegaron al lugar a bordo de un automóvil de bebé, en el que ocultaban un recipiente de plástico lleno de gasolina. Posteriormente, una vez en las cercanías del edificio, entregaron el combustible a William Castro Torrado y otros dos individuos cuya identidad aún no ha sido completamente establecida, quienes procedieron a rociar y prender fuego a la propiedad.
La acción criminal resultó en la trágica muerte de un funcionario del registro, quien se encontraba atrapado dentro del edificio, y dejó a otras seis personas con graves heridas, incluyendo tanto al personal de logística como a ciudadanos que estaban en el lugar realizando diferentes trámites. Muchos de los heridos requirieron tratamientos médicos prolongados y continúan lidiando con secuelas físicas y psicológicas.
Responsabilidad comprobada y penalización máxima
Condenado Foto:Fiscalía
Durante el desarrollo del juicio, la Oficina del Fiscal presentó pruebas forenses obtenidas en el sitio del incendio, así como informes elaborados por los organismos de bomberos y expertos en delitos. Se concluyó que el fuego fue iniciado utilizando un acelerante inflamable.
Además, los testimonios de los vecinos y las grabaciones del área jugaron un papel crucial al ubicar a los procesados en la escena del crimen y documentar el momento en que manipulaban el vehículo con el tambor de gasolina.
El juez determinó que había una clara planificación detrás de los actos, subrayando que los acusados actuaron sabiendo del daño que podrían causar, sin justificación alguna de defensa propia o reacción espontánea. La pena de 60 años fue dictada en consonancia con lo que establece la legislación colombiana para este tipo de delitos agravados.
Condenado Foto:Fiscalía
Reacciones y proceso judicial en curso
A pesar de que la condena fue recibida con apoyo por parte de las familias de las víctimas y de las agencias encargadas del control electoral, lo cierto es que esta sigue siendo de primera instancia. Los abogados defensores han anunciado que interpondrán los correspondientes recursos de apelación, lo cual sugiere que el caso podría escalar al Tribunal Superior de Valledupar en los meses venideros.
Por otro lado, la oficina del fiscal enfatizó que este fallo sentará un precedente crucial en la lucha contra la violencia política y electoral que ha afectado a diversas regiones del país. «No permitiremos que el miedo o la violencia se instalen en nuestros procesos democráticos. La justicia ha hablado y ha impuesto una sanción ejemplar a quienes son responsables de este atroz evento», afirmaba uno de los fiscales del caso.
Asimismo, la Fiscalía General expresó su respaldo a la decisión del juez y solicitó a las autoridades continuar con la identificación y captura de otros implicados que aún permanecen en libertad. Se estima que al menos dos personas más jugaron un rol directo en la ejecución del incendio.
El municipio de Gamarra, ubicado en la parte sur del Cesar, ha estado atravesando días de tensión y ansiedad tras el ataque a su registro, en un entorno de alta polarización política. Se espera que esta sentencia ayude a poner un cierre a uno de los capítulos más dolorosos de las elecciones del 2023 en el país.