Nestlé ha anunciado el despido de 16.000 empleados en todo el mundo, y recaerá especialmente en los llamados empleos «de cuello blanco». Entre las razones que argumenta la empresa a través de de una declaración destaca uno: «Estamos evolucionando y simplificaremos nuestra organización y automatizaremos nuestros procesos».
La decisión ha generado incertidumbre tanto a nivel mundial como en España, donde su filial española cuenta con más de 4.000 empleados y varias fábricas. Sin embargo, lo más sorprendente es que, por primera vez, es una empresa de alimentación y no una tecnológica la que toma una decisión de este tipo: recortar empleo para aplanar la organización y automatizar roles de oficina.
Cambiar a una cúpula más agresiva. Nestlé ha dado un giro drástico en su política interna al anunciar la eliminación de 16.000 puestos de trabajo. Eso representa alrededor del 6% de su fuerza laboral global total. Esta decisión ha sorprendido a los mercados, ya que se produce justo después de haber presentado unos resultados que muestran un crecimiento en sus ingresos y ventas a lo largo de 2025.
Poco después, su nuevo director general, Philipp Navratil, explicó en tu perfil de LinkedIn la apuesta decidida de la compañía por la automatización y digitalización de sus procesos bajo un plan de reducción de costes impulsado por la nueva dirección de la compañía. De hecho, la anterior junta ya tenía en marcha un plan de ajuste en el que se iban a ahorrar 541,4 millones de euros. Con el nuevo liderazgo directivo, el objetivo de ahorro se ha duplicado hasta los 1.082,8 millones de euros para 2027.
Los despidos ya no se deben a problemas económicos. Cuando una empresa anunciaba despidos, normalmente estaban asociados a una mala situación económica. Sin embargo, como hemos visto en diferentes empresas tecnológicas como Amazon, Google o Microsoft, los despidos y las finanzas ya no están necesariamente relacionados.
En el caso de Nestlé, la compañía registró un crecimiento orgánico de sus ventas del 3,3% en los primeros nueve meses de 2025, consolidando sus cifras en diferentes mercados globales. Según explicó Navratil, el principal argumento de los despidos es la optimización de la empresa para prepararla para un futuro escenario competitivo y, para ello, se iba a centrar en simplificar la organización y automatizar procesos (¿con IA?) cuando corresponda. El mismo argumento que las grandes empresas tecnológicas llevan meses esgrimiendo en el contexto de la carrera por la IA.
Distribución de despidos y su impacto. Según ha confirmado Nestlé, los despidos afectarán principalmente a los trabajadores de «cuello blanco» y alrededor de 12.000 empleados estarán en funciones de oficina y administrativas, mientras que alrededor de 4.000 despidos más se repartirán entre los departamentos de producción y cadena de suministro.
La compañía no ha detallado la distribución geográfica exacta de los despidos, lo que mantiene la incertidumbre en mercados clave como España, donde El personal y los sindicatos han demostrado Preocupación por la posibilidad de que cierren fábricas o reduzcan la producción en determinadas ciudades. Nestlé emplea a alrededor de 4.000 personas en España en 10 centros de producción en cinco comunidades autónomas: Cantabria, Asturias, Extremadura, Galicia y Cataluña.
En | Las Big Tech no paran de despedir a sus ingenieros. Al mismo tiempo, han pisado el acelerador en la contratación
Imagen | Estar protegido