En una decisión dividida, la Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó que los ex presidentes pueden disfrutar de la inmunidad parcial por los actos llevados a cabo en el ejercicio de sus funciones oficiales. Este fallo tiene implicaciones directas en los juicios contra Donald Trump, acusado de incitar el asalto al Capitolio en 2021 e interferir con las elecciones presidenciales.

La mayoría conservadora de la Corte determinó que Trump podría protegerse de algunas de las posiciones, aunque otros procesos continuarán. El veredicto ha generado una tormenta política y revive el debate sobre el alcance del poder presidencial. Los demócratas consideran el fallo como un precedente peligroso, mientras que los republicanos celebran la decisión.

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