El Estrecho de Ormuz es el camino navegable más importante del mundo para transportar petróleo. Las hostilidades entre Irán e Israel despiertan temores de que el transporte marítimo y crudo pueda disminuir.

El Estrecho de Ormuz es un camino de navegación esencial que une a Omán e Irán, vinculando al Golfo Pérsico con el Golfo de Omán y el Mar Árabe.

La Administración de Información de Energía de los Estados Unidos (EIA en inglés) lo define como «el punto de estrangulamiento más relevante del tráfico petrolero en todo el mundo».

En su posición más estrecha, el camino marítimo apenas mide 33 kilómetros de ancho y 3.21 kilómetros de ancho en cada dirección, lo que lo hace extremadamente peligroso.

Se estima que alrededor de 20 millones de barriles de petróleo, condensado y combustibles circulan diariamente a través de dicho canal, según información de Vortexa, una consultoría para el sector de energía y transporte.

Qatar, que es uno de los principales productores de gas natural licuado (GNL) a nivel mundial, se basa en gran medida en el estrecho para realizar sus exportaciones de GNL.

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