Procuraduría le pide al IGAC que reanude la demarcación entre Barranquilla y Puerto Colombia después de 30 años de controversia
– Tinta clara
junio 18, 2025
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Después de casi tres décadas de litigios, las acusaciones cruzadas y las suspensiones administrativas, el conflicto sobre los límites territoriales entre Barranquilla y Puerto Colombia regresa al centro
Después de casi tres décadas de litigios, las acusaciones cruzadas y las suspensiones administrativas, el conflicto sobre los límites territoriales entre Barranquilla y Puerto Colombia regresa al centro del debate público. La segunda oficina del abogado delegado para la vigilancia de la función pública lanzó un llamado urgente al Instituto Geographic Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) para reanudar el proceso de demarcación en el área conocida como el «Corredor universitario», Una franja clave para el desarrollo urbano, educativo y económico del norte del Atlántico.
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El ministerio público advirtió que, En ausencia de una línea divisoria clara y definitiva, es necesario Los habitantes e inversores en ese sector.
Un viejo conflicto de datos con impacto estratégico
El corredor universitario es el camino que se comunica desde Barranquilla a Puerto Colombia. Foto:Redes sociales
El origen del conflicto se remonta a mediados de la década de 1990, cuando la Asamblea del Atlántico aprobó la incorporación de más de 1,400 hectáreas en el municipio de Puerto Colombia, incluidas las tierras que hoy albergan importantes desarrollos educativos, residenciales y comerciales. Sin embargo, esa decisión fue anulada años más tarde por el Consejo de Estado, confirmando una sentencia del Tribunal Administrativo del Atlántico que declaró la modificación de los límites sin la intervención del Congreso de la República ilegal.
Desde entonces, la disputa ha continuado sin una solución institucional fundamental. El IGAC, una entidad a cargo de avanzar en los procesos de demarcación, había iniciado un procedimiento técnico en el área, pero la suspendió después de que el distrito de Barranquilla presentó un derecho de petición discutiendo brechas en el proceso y solicitando su archivo.
Esa pausa dejó en el limbo administrativo a una de las áreas más dinámicas del departamento, donde universidades, complejos residenciales, centros médicos, colegios y áreas de expansión urbana cuya jurisdicción cuya jurisdicción cuya jurisdicción cuya jurisdicción cuya jurisdicción cuya jurisdicción – y, en consecuencia, su planificación y control – sigue siendo objeto de disputa.
La llamada de la Oficina del Fiscal General: Regrese a la ruta institucional
Corredor universitario a Puerto Colombia. Vanexa Romero/The Weather Photo. Foto:Vanexa Romero/ El TIempo
Frente al estancamiento, La oficina del Fiscal General recientemente convocó una tabla de trabajo inter -institucional para reactivar el diálogo entre las partes y desbloquear el proceso. En su exhortación pública, instó al IGAC a continuar con el proceso de demarcación, dada su competencia técnica, y Establecer un límite provisional, mientras que el Congreso de la República ejerce su función de definir definitivamente los límites intermunicipales.
La función preventiva del ministerio público busca evitar que la indefinición territorial afecte la gobernanza en esta área del departamento. Es por eso que promoveremos escenarios de concertación y recordamos a las autoridades locales su obligación de actuar con la responsabilidad y la voluntad de comprender
Oficina del Fiscal para la vigilancia de la función pública
El ministerio público También reiteró que esta controversia no puede continuar posponiendo por razones políticas o administrativas, ya que afecta los derechos fundamentales, como la provisión eficiente de los servicios públicos.La inversión en infraestructura y la certeza legal de aquellos que viven y desarrollan actividades económicas en el área.
Una región dividida entre límites y competencias
Corredor universitario a Puerto Colombia. Vanexa Romero/The Weather Photo. Foto:Vanexa Romero/ El TIempo
Mientras tanto, las posiciones de Barranquilla y Puerto Colombia todavía no se están acercando.
Del distrito de Barranquilla Se ha insistido en que el IGAC no puede avanzar sin ser determinado primero si existe o no una superposición legítima de competencias.
Puerto Colombia, Por otro lado, ha defendido su presencia histórica en el área y afirma que se respeta el proceso de incorporación aprobado por la Asamblea, a pesar de las fallas judiciales en su contra.
Mientras tanto, los efectos prácticos de la indefinición se sienten día a día: los ciudadanos que no saben qué autoridad deben procesar los permisos, propiedades con doble registro fiscal, proyectos de inversión arrestados por incertidumbre legal y dificultades para coordinar la seguridad, la educación y las políticas de movilidad en un territorio de disputas.
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«Es urgente que el Congreso asume su responsabilidad y que las entidades técnicas proporcionen las herramientas necesarias para una definición de límites transparente y legítimo»un experto en derecho administrativo consultado por Tiempoquien enfatizó que la solución no puede continuar posponiéndose indefinidamente.
Lo que viene: hacia una definición definitiva
Corredor universitario a Puerto Colombia. Vanexa Romero/The Weather Photo. Foto:Vanexa Romero/ El TIempo
La intervención de la oficina del abogado marca un nuevo intento de desbloquear un conflicto que ha subido del avión legal al institucional, con profundas repercusiones territoriales. El llamado para reanudar la demarcación técnica y avanzar hacia un límite provisional busca al menos dar claridad temporal a los actores locales y nacionales que operan en el área.
Sin embargo, como han advertido varios sectores, Cualquier solución provisional debe estar acompañada de una ruta clara en el Congreso de la República, Solo autoridad competente para modificar formalmente los límites entre los municipios.
Mientras tanto, El área del corredor universitario sigue siendo una pieza clave del rompecabezas territorial del Atlántico: Una tira estratégica atrapada entre mapas superpuestos, decisiones canceladas y una solución definitiva que, por ahora, permanece en el aire.