Las autoridades informaron que ocho de las víctimas fueron reportadas en ataques contra Pakistán y tres en la India.

Por lo menos 11 civiles perdieron la vida en la serie de bombardeos que ocurrieron entre India y Pakistán en la noche del martes y las primeras horas del miércoles (07.05.2025). Este trágico suceso marca un nuevo aumento en las tensiones que han persistido entre estos dos países, ambos poseedores de armas nucleares, y cuya relación ha sido históricamente complicada y conflictiva.

El enfrentamiento armado tiene sus raíces en un ataque que se llevó a cabo el 22 de abril en la región de Cachemira, que se encuentra bajo la administración de India. Este ataque resultó en la muerte de 26 personas, después del cual Nueva Delhi ha acusado a Islamabad de ser responsable de estos actos de violencia. Sin embargo, Pakistán ha rechazado estas acusaciones, lo que ha llevado a un aumento en las hostilidades entre ambas naciones.

Cachemira, un área predominantemente musulmana, ha sido un punto focal de conflicto entre India y Pakistán desde que ambas naciones se emanciparon del dominio británico en 1947. Desde entonces, la región ha sido objeto de múltiples enfrentamientos, lo que ha provocado una profunda división y resentimiento entre los dos países. En medio de los recientes ataques, el gobierno de la India ha declarado que sus tropas llevaron a cabo operaciones contra «estructuras terroristas en Pakistán», argumentando que fueron desde allí donde se planearon y ejecutaron los ataques.

El teniente general Ahmed Chaudhry, quien es portavoz del ejército de Pakistán, ha informado que entre las víctimas fatales se encontraba una niña de tan solo tres años. Además, se reportaron 35 heridos y la desaparición de dos personas en consecuencia de estas operaciones militares.

Llamado para evitar una escalada

A raíz de los bombardeos, se escucharon múltiples explosiones en la región de Cachemira. Los periodistas de la AFP en la parte india confirmaron que estos estruendos se registraron cada vez más cerca de la línea de control, que establece la frontera oficial entre India y Pakistán. El Ejército indio ha declarado que se llevaron a cabo ataques de artillería por parte de Pakistán, los cuales impactaron en grupos civiles de Cachemira. Como resultado, tres civiles inocentes perdieron la vida por estos disparos indiscriminados.

Este miércoles, una fuente de seguridad reveló que tres aviones de combate pertenecientes al ejército indio chocaron en su territorio, aunque los motivos detrás de este incidente aún no han sido aclarados. Según esta misma fuente, los restos de dos de estos aviones fueron encontrados en la región de Cachemira, que se ha convertido en un área de conflicto con Islamabad, y otro en el estado de Punyab, que colinda con Pakistán.

«La respuesta ha comenzado y, si Dios quiere, se intensificará (…) No tardará mucho tiempo en resolverse esta situación», comentó Khawaja Asif, el ministro de Defensa de Pakistán. La expectativa de un conflicto a gran escala entre dos potencias nucleares genera una creciente preocupación en la comunidad internacional.

Marco Rubio, quien ocupa el cargo de Secretario de Estado de los Estados Unidos, ha instado a los líderes de ambos países a «reajustar la situación y evitar una nueva escalada», mientras que la ONU ha solicitado «máxima moderación» en ambos lados del conflicto. «El mundo no puede tolerar una guerra entre India y Pakistán», afirmó Stephane Durric, representante del secretario general António Guterres.

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